Sí y no

Pero sobre todo, hermanos míos, no juréis, ni por el Cielo, ni por la tierra, ni por ningún otro juramento; sino que vuestro sí sea sí, y vuestro no sea no, para que no caigáis en condenación

Santiago 5:12

Alguien dijo en una ocasión:

Hay clases de personas y personas con clase

Decía una canción antigua:

Con el pasar de los años, he aprendido en la vida….
Queridos amigos, no os cuento nada nuevo si os digo que los tiempos que estamos viviendo son tiempos extremadamente difíciles. Difíciles por muchas razones, pero yo no quiero centrarme en esas razones en las que muchos pueden estar pensando ahora mismo, ya sea la crisis económica, el desempleo, la frustración de tener los políticos que tenemos, etcétera. Yo quiero centrarme en los tiempos difíciles donde la palabra de una persona hoy «parece que no vale nada». Aún recuerdo con nostalgia los tiempos en los que mi abuelo me contaba que antiguamente los tratos entre dos personas se cerraban con un simple apretón de manos. Y si una parte te decía una cosa, eso lo llevaban hasta las últimas consecuencias.

¿Qué está pasando hoy en día? ¿Por qué la palabra de una persona ya no tiene valor? ¿Es que el mundo está cambiando para mal y los creyentes con el mundo?Os pongo ejemplos sencillos: Antes quedabas con una persona a una hora y eso era sagrado, hoy lo raro es que la persona llegue a esa hora. Antes le decías a alguien un sí o un no y eso se mantenía. Hoy lo raro es que se cumplan esas promesas.

Queridos amigos, en estos últimos tiempos que vivimos, como dice la Palabra del Señor, el amor de muchos se enfriará. Y yo añadiría, y la palabra de muchos también se enfriará. Cuán necesario es que volvamos a tener sentido común y comencemos a vivir tan sencillamente que lo único que hagamos sea seguir las pautas que marca la Biblia y no las pautas que marca el mundo. Tú decides.

Tomados del libro de devocionales del Pastor: “Meditad sobre vuestros caminos”.