Pelea la buena batalla de la fe, echa mano de la vida eterna, a la cual asimismo fuiste llamado, habiendo hecho la buena profesión delante de muchos testigos.
1 Timoteo 6:12
Dijo en una ocasión Willian Shakespeare:
Nosotros debemos nuestra vida a Dios, por eso si se la pagamos hoy, no se la deberemos mañana.
Estimado amigo, es mi oración y deseo que este tiempo esté siendo un tiempo muy bueno para tu vida. Normalmente, este es un tiempo que muchas personas (los que pueden) se dan un respiro e intentan «recargar fuerzas».
Que si las clases de los niños, que si la rutina normal de cada día, que si el trabajo, etc. Y créeme, ¡qué buena es esa rutina! si se tiene trabajo para sobrevivir con los tiempos que corren…
La vida es una continua lucha. Hay que luchar por el/la esposo/a, por los hijos, por el trabajo, con la hipoteca… ¡Cuántas luchas! Pero el apóstol Pablo en el versículo del encabezamiento nos anima para que peleemos una buena batalla. Que no nos perdamos en discusiones y peleas necias como mucha gente. Vemos políticos cada día peleando por vanidades, bueno, por un puñado de votos. Pablo nos anima a pelear la batalla de la fe.
¿Cómo podemos pelear bien esa batalla? Pues muy fácil… Debemos estar centrados en lo realmente importante, en esos valores que son perdurables y que tienen una repercusión eterna. Debemos pensar y pelear bien esa batalla de la vida echando mano a lo más importante, la vida eterna.Sin esa vida eterna que Dios nos ha regalado, sin mirar al futuro sabiendo que la guerra está ganada porque Cristo ya la ganó por nosotros, no podremos tener el triunfo final en la batalla de la vida. Con Cristo la victoria estará asegurada.
Tomados del libro de devocionales del Pastor: “Meditad sobre vuestros caminos”.