Pues así ha dicho el Señor de los ejércitos: Meditad bien sobre vuestros caminos. Sembráis mucho, y recogéis poco; coméis, y no os saciáis; bebéis, y no quedáis satisfechos; os vestís, y no os calentáis; y el que trabaja a jornal recibe su jornal en saco roto.
Hageo 1:5-6
Casi sin darnos cuenta, el tiempo va pasando. Y me gustaría que tomaras un momento y pensaras en esas «promesas» que a finales del año pasado o principio de este hiciste con tanta ilusión. Párate por un momento, por favor, no sigas leyendo y piensa en esas promesas… ¿Cuántas han quedado ya olvidadas? ¿Cuántas están en el proceso de ser definitivamente promesas del pasado? ¿Cuántas…?
En el versículo del encabezamiento el profeta hace un llamado al pueblo para que «medite sobre sus caminos». En nuestro mundo, casi que lo menos que hacemos es meditar. Todo va tan rápido que parar un tiempo y meditar, suena como «perder el tiempo». Pero te puedo asegurar algo, que si la Biblia dice que meditemos, hacer eso no es perder el tiempo. ¿Cuántas veces perdemos segundos, minutos, horas, días, meses y años en cosas que no tienen ninguna trascendencia espiritual? ¿Cuántas veces gastamos dinero, energía, esfuerzos, etc., en «bobadas» de este mundo que incluso son capaces de quitarnos el sueño y la paz de Dios? ¿Cuántas veces…?
Estimados amigos, la Palabra de Dios nos recuerda:
Meditad bien sobre vuestros caminos.
Desde estas sencillas letras, en este día simplemente quiero animarte a que «medites bien sobre tus caminos».Y si crees que no tienes tiempo para meditar con Dios sobre ellos, es que simplemente crees que no necesitas a Dios. Hoy quiero terminar con una cita bíblica que se encuentra al final de cada pasaje bíblico escrito originalmente para esas 7 iglesias del Apocalipsis.
La cita bíblica dice lo siguiente:
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.